En busca de esculturas: un elefante, un indio, un maorí, una tortuga y otras formas a descubrir.
El bosque encantado de Òrrius es un bosque mágico donde encontraréis grandes figuras de piedra cortadas con diversas formas que se pueden reconocer fácilmente.
Ubicación: El Bosque encantado de Òrrius se encuentra en el término municipal de la Roca del Vallés, en el Vallès Oriental, dentro del bosque de Ca l’Argent (un bosque privado donde se permite el paso). Se cree que las figuras son obra I. Foscas y A. Gómez y que se realizaron en los años 70.
¿Cómo llegar?: Saliendo de la Roca por la BV-5006 encontraremos un parking a mano derecha donde podremos dejar el coche y donde empieza la ruta.
Coordenadas (41°34’23.21″N 2°20’6.01″E). Algo más arriba también hay una entrada, pero no podremos dejar el coche.
El paseo: Haremos un paseo de 900 metros (ida y vuelta) con los niños y niñas que será toda una aventura de descubrimiento y creatividad.
La mini ruta transcurre por un camino de tierra. Debemos ir mirando al suelo, ya que hay piedras y troncos que sobresalen.
Si vais en cochecito de bebé, debéis tener en cuenta que hay algunos tramos con escaleras, hechas con troncos.
Por el camino hay grandes piedras sin esculpir y podremos preguntar a los niños si les encuentran algún parecido.
Será un entretenimiento hasta encontrar las piedras con formas y así pondrán en marcha su imaginación y creatividad.
Recordad ir siempre hacia la izquierda cuando encontréis un desvío.
Siguiendo el camino llegaréis hasta una amplia zona donde se encuentra la primera de las figuras: ¡el elefante!
En esta zona, podréis sentaros en alguna de las piedras y dar ideas sobre qué forma parecen tener las otras piedras. ¿A qué se parecen?
Nosotros encontramos la cabeza de una tortuga y una ballena/delfín.
Seguimos el camino hasta llegar a otra zona más ancha donde encontraremos el indio.
Después de hacer fotos y observarlo, dad la vuelta a la piedra… ¡Y, sorpresa! ¡En el otro lado encontraremos un pequeño maorí, típico de la Isla de Pascua!
Precaución: NO sigáis por el camino recto, ni dejéis a los niños/as que vayan solos. Al final del camino se encuentra el paso de la carretera que queda unos metros más abajo.
En ese punto la ruta de las curiosas y misteriosas figuras habrá finalizado. Podéis girar y volver al aparcamiento o tomar el camino de la derecha y continuar paseando.
Y después de la excursión visitad el Parque Fluvial de Vilanova del Vallès, un espacio con juegos y mesas de madera. Se encuentra a 10 minutos en coche del bosque, a unos 7 kilómetros.
Más información sobre el Parque Fluvial de Vilanova del Vallès