BUTTERFLY PARK EMPURIABRAVA, EN EL ALT EMPORDÀ

Para conocer el fascinante mundo de las mariposas

Si queréis ver mariposas y aves exóticas no podéis perderos la visita al Butterfly Park, muy cerca de Castelló d’Empúries, en la Costa Brava. Viven en un jardín tropical de 2.000 m2 entre una exhuberante vegetación.

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Entráis al ivernadero por una puerta y enseguida notáis el calor, como si estuviérais en una selva tropical.

Lo primero que veis son aves exóticas, que vuelan, beben, comen… En definitiva, que viven libremente y nos dejan observar sus colores y belleza.

Hay diversas especies de aves exóticas como cotorras, amazonas o los loros eclectos, entre muchos más. En la tienda podéis comprar comida y alimentar a las aves vosotros mismos para tener un contacto más directo con ellos.

Cruzáis una puerta, la cual os lleva a una zona espectacular y con una gran vegetación donde os encontráis con unas aves exóticas muy curiosas como los ibis, los tucanes o la paloma más grande del mundo.

Hay una zona boscosa exterior donde encontráis los Muntjaks, unos ciervos que provienen del sur de Asia, muy curiosos y simpáticos.

Para entrar a una zona nueva tenéis que acceder por una cueva donde viven unos murciélagos fructívoros, unos bonitos mamíferos de Centroamérica. Después de la cueva entráis en la zona de las iguanas y pequeñas aves exóticas. Para salir encontráis otra cueva donde hay un pequeño acuario con peces ciegos.

Finalmente llegaréis al jardín donde viven las mariposas, caminitos por donde pasear y descubrir el fascinante mundo de estos animales.

Podréis disfrutar de un espectáculo único: mariposas de toda clase. De muchos colores, de las que vuelan sin parar, las que comen y las que están tan quietas que parece que quieran que admiréis su belleza y que os dan la oportunidad de hacer fotografías increíbles.

En Butterfly Parkviven algunas de las más preciosas especies del mundo, como la Morpho, una mariposa de color azul eléctrico que podréis ver pasar por delante de vuestros ojos.

No sólo podréis ver y observar mariposas, también podréis conocer de qué se alimentan, cómo se reproducen, la metamorfosis, sus mecanismos de defensa y las curiosidades que las rodean. El Park cuenta con armarios con puertas de cristal donde se pueden ver las crisálidas y pretende sensibilizar a los visitantes sobre la importancia de la conservación de las mariposas y su ecosistema.

Si observáis con atención podréis ver el ciclo vital de la mariposa, desde los huevos, la oruga y la crisálida hasta que se convierten en mariposa. En el recorrido hay símbolos que indica en qué puntos podéis ver huevos, orugas o crisálidas.

Los niños y niñas viven un sueño paseando entre mariposas, aves y animales exóticos.

La vegetación y la temperatura

Las plantas que hay en el invernadero son fundamentales para la supervivencia de las mariposas. Muchas de ellas ayudan a recrear el ecosistema tropical y son un lugar de descanso para las mariposas. Otras son ricas en néctar, alimentando a las mariposas.

En el invernadero hay una temperatura de 28 grados y un 80% de humedad. Estas características hacen que puedan sobrevivir en un hábitat adecuado para ellas. Para equilibrar el ecosistema el parque cuenta con codornices chinas que se alimentan de hormigas y arañas. Las hormigas comen huevos de mariposa y las arañas orugas y mariposas adultas.

Curiosidades

Su nombre científico es “lepidópteros” que en griego significa: alas cubiertas de escamas.
Las mariposas tienen el sentido del gusto en las patas.
Aparecieron hace 150 millones de años y convivieron con los dinosaurios.
Las orugas se comen en algunos países.
La mariposa más grande puede llegar a los 30 centímetros y la más pequeña mide 3 milímetros.
Hay mariposas migradoras que pueden llegar a recorrer miles de kilómetros.
El macho de la polilla Atlas puede detectar a una hembra a 5km de distancia.
Las hembras de la mariposa nocturna Spodoptera Littoralis pueden poner hasta 4.000 huevos.
La oruga multiplica su peso por 10.000 desde que nace hasta que se convierte en crisálida.
La vida de las mariposas varía en función de la especie a la que pertenecen, desde los 2 o 3 días hasta los 9 meses.
Hay mariposas venenosas y otras que se pueden camuflar en el entorno.
Se han identificado más de 20.000 especies distintas.
Muchas mariposas se alimentan del zumo de la fruta madura y pueden vivir más tiempo que las que se alimentan sólo del néctar.