¡Los 3 juegos sensoriales para bebés que podéis hacer desde casa!
¡Los bebés tienen todo un mundo para descubrir y explorar! Y nosotros, como padres y madres, les podemos ayudar desde muy pequeños a desarrollar todos sus sentidos. Y para hacerlo, ¡os proponemos los juegos sensoriales! Y no, no hay que comprar ninguno si no queréis, porque los podemos hacer desde casa y pasar un buen rato. ¡Desde Sortir amb nens os enseñamos cómo hacer 3 juegos sensoriales para bebés!
Aprendemos los diferentes tactos
Necesitamos…
- Bolsas de plástico que cierren bien
- Algodón
- Legumbres, arroz o pasta
- Rotuladores
Edad recomendada: ¡desde muy pequeños!
¡Este es quizás el juego sensorial más fácil de hacer! Porque solo necesitamos bolsas de plástico que venden en cualquier supermercado y que cierren bien, ¡muy importante esto!
Después, escogemos diferentes materiales para poner dentro; legumbres, pasta, arroz, bolitas, algodón… ¡Lo que queráis! De hecho, cuantas más cosas mejor, ya que esto proporcionará más información sensorial al niño o niña.
Si optáis por el algodón, podéis hacer un dibujo de un perrito, un oso o un gatito, y así, no solo sentirán el tacto del algodón, también tendrán que rellenar el dibujo con el algodón, y esto les ayudará también en su psicomotricidad.
Atamos los cordones de los zapatos
Necesitamos…
- Papel o cartulina
- Rotuladores
- Tijeras
- Cuerda
Edad recomendada: más de 2 años
Esta actividad es algo más compleja, pero sin duda será de gran ayuda en el día a día de los niños y niñas. Para hacerla, dibujamos dos zapatos y hacemos agujeros en los lugares por donde pasan los cordones. Cortamos una cuerda y la pasamos por los diferentes agujeros como si fueran unos zapatos reales.
Una vez lo tenemos, ¡empieza el juego! A ver cómo abrochamos los zapatos y cuánto tiempos tardamos en hacerlo.
Pintamos y tocamos haciendo un cuadro
Necesitamos…
- Lienzo
- Pinturas
- Celo
- Papel de film
Edad recomendada: más de 2 años
Esta actividad es una de las favoritas de los niños y niñas. En este caso, mejor cuando sean algo más grandes, ya que corremos el riesgo de que quieran metérselo todo en la boca.
Y si queremos hacer todavía más interesante el juego y que quede un bonito recuerdo, primero podemos hacer formas con el celo; su nombre, figuras, animales… Después, ponemos diferentes colores de pinturas, ¡las que más nos gusten! Y lo cubrimos con papel de film para no mancharnos.
Ahora, ¡solo queda jugar y tocar la pintura esparciendo todos los colores y formando la imagen que hemos creado!
Si os han gustado estas ideas, os recomendamos todos estos juegos para trabajar texturas con niños y niñas. ¡El aburrimiento en casa no existe!