IMANES DE NEVERA

¡Cualquier detalle puede ser un imán para la nevera de casa!

En la puerta de la nevera colgamos de todo: la lista de la compra, los imanes que nos regalan con algunos yogures, fotografías, notas con algún recordatorio, calendarios, menús infantiles, dibujos de nuestros hijos…

¿Por qué no convertirlo en un escaparate de nuestras creaciones en forma de imanes?

Podemos colgar cualquier cosa, siempre y cuando no pese mucho, e incluso dar una utilidad.

Sólo tenemos que hacer un repaso a la habitación de los más pequeños y ver qué encontramos.

Cualquier objeto es válido para pegarlo en un imán y hacer un objeto decorativo para la nevera.

Los peques pueden ser los que decidan qué pasará de ser un simple objeto o muñequito perdido en una caja o en un cajón a ser un imán que tendrá todo el protagonismo en la nevera.

Proponemos algunos ejemplos, pero la mejor fuente de inspiración serán vuestros hijos e hijas:

• Pinzas de tender la ropa: las pueden pintar ellos mismos o engancharle con pegamento cualquier objeto o muñequito. A parte de decorar, las pinzas servirán para colgar mensajes o recordatorios.

• Piedras, conchass…: cualquier recuerdo de una excursión puede servir para decorar nuestro frigorífico.

• Figuras, muñecos o peluches pequeños: pesan muy poco y son fáciles de enganchar en un imán. ¡Y quedan preciosos!
• Dibujos y creaciones: un tapón de corcho cortado nos puede servir para hacer dibujitos o caras…¡Y muchas más ideas que podéis encontrar echando un vistazo a los pequeños tesoros escondidos en la habitación de tu hijo o hija!