¡Ruta por la cultura de Blanes con niños!
Blanes es una pequeña población de costa con un gran legado cultural gracias a los vizcondes de Cabrera. De hecho, el origen de Blanes se remonta en el año 1260 cuando el vizconde Guerau VI de Cabrera y Guillermo de Blanes consolidaron el casco urbano para atraer población. De esta historia todavía se conservan edificios, iglesias, castillos e incluso la propia estructura. Desde Sortir amb nens os explicamos los puntos principales para conocer la cultura de Blanes con niños.
El pasado medieval del centro de la vila
La misma estructura medieval es ahora el centro de Blanes. Paseando por el núcleo antiguo podemos darnos cuenta que las calles todavía conservan este aire medieval. Esta zona también es conocida como Dintre Vila, y se pueden apreciar estas antiguas calles desde la calle Muralla. Ahora está llena de tiendas y comercios con un encanto histórico y especial.
En la calle Ample encontramos les Voltes, donde residían las élites de la población y del que han quedado cuatro arcadas principales de los porches de las antiguas casas. En una de las vueltas también están presentes los copatronos de la ciudad: Sant Bonosi y Maximià.
Y uno de los otros puntos a destacar de la calle Ample es la Font Gótica, que de hecho es la fuente de este estilo mejor conservada de Cataluña y una de las más importantes en toda Europa. El vizconde Bernat Joan de Cabrera se la encargó a Pere Torrent, un pedrero barcelonés que la levantó en 1443.
El Ayuntamiento
En el siglo XV es cuando se consolidó el sistema municipal de Blanes. Fue entonces cuando se redactaron las normativas en el Libro de la Universidad de la Vila de Blanes. Desde entonces los documentos, normas y la historia en si se agruparon en este códice. Y todavía se puede leer una parte de su pasado al Ayuntamiento, conocido como «Casa de la Vila».
El Portal de la Verge Maria
Al ser un pueblo de costa, Blanes sufría saqueos. Esto hizo que hacia el siglo XIV empezaran a construir un muro que, pocos siglos después, desapareció. Aun así todavía se conserva el que fue la puerta de montaña, hoy conocida como el Portal de la Verge Maria, donde incorporaron una hornacina dedicada a la virgen.
El Palacio de los Vizcondes y la iglesia de Santa Maria
Antiguamente Santa Maria era solo una pequeña iglesia del siglo X. Al 1246 pasó a ser de la parroquia de San Esteve de Tordera hasta que al 1319 fue independiente. En aquel momento empezó la construcción de la fábrica gótica, que a principios del siglo XX contó con un retablo barroco y figuras modernistas de Gaudí. En la Guerra Civil quedó casi destruida, y a pesar de que fue reedificada, de su construcción original queda la fachada gótica, la planta y la sacristía.
En el mismo recinto estuvo edificado el Palacio de los Vizcondes de Cabrera, construido a finales del siglo XIV, a pesar de que fue destruido por los franceses en el siglo XVII y hoy en día solo queda el perímetro y el patio de armas.
El puerto de Blanes
El Puerto de Blanes fue el más importante de todo el territorio de los vizcondes de Cabrera. Tanto es así que se convirtió en uno de los puertos más transitados e importantes de toda la Cataluña medieval. Finalmente, a principios del siglo XX, fue necesaria la construcción de los astilleros, que estuvieron terminadas en los años 40.
El Castillo de Sant Joan
El Castell de Sant Joan, antes conocido como Castell de Blanes o Castell de Forcadell, forma parte del paisaje de Blanes desde casi su origen. De hecho, en 1002 ya aparece citado a un documento el vizconde Sunifred de Girona. En el año 1050 el castillo pasó a manos de los vizcondes de Cabrera. El castillo se encuentra en un cerro a 170m de altura y con una torre cilíndrica de 15m rodeada de una fosa. Sin duda, lo mejor es tanto su historia como sus vistas de toda la zona de Blanes.
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