Consejos para saber cómo mantener la calma en casa
Quizás durante estos días vemos que poco a poco nos va disminuyendo la paciencia, y no solo a los padres y madres, sino también a los hijos/as. Tenemos que pensar que es normal que los niños sientan angustia, como nos pasa a nosotros mismos, o incluso un poco de tristeza. ¡Pero todo tiene solución! Os explicamos algunos consejos para aprender a mantener la calma en casa.
Si necesitan llorar, que lloren
Es bueno que todos tengamos la oportunidad de demostrar todo lo que sentimos y desahogarnos con nuestros sentimientos. Sobre todo los niños/as y más en circunstancias así. Si necesitan llorar, que lloren, si necesitan hablar, que hablen, nosotros tenemos que estar presentes. Pero también es muy importante que, una vez se les pase, recuperen la alegría con juegos o entretenimiento.
Mantener la calma entre los padres
Estar todo el día en casa y todos juntos también hace perder la paciencia de los padres y madres. Y en este caso, tenemos que seguir más o menos la misma línea que los niños. Hablar de lo que sentimos, cómo lo llevamos, de nuestras emociones… Nuestra ventaja como adultos, ¡es que hablando nos acabamos entendiendo bien! Así pues, es necesario hablar y solucionar los problemas. Y sin perder la paciencia con los pequeños de casa.
Tiempo libre para padres y madres
Parece imposible, ¡pero lo podemos conseguir! Es sano que continuemos teniendo un poco de tiempo libre para nosotros mismos, aunque sea menos tiempo que antes. Podemos aprovechar cualquier momento en que los niños/a estén jugando, o haciendo los deberes de la escuela a distancia, o cuando se vayan a la cama. Cerramos los ojos y nos relajamos. Podemos poner en práctica diferentes técnicas de respiración para conseguirlo.
Técnicas de relajación para los niños
Si los padres/madres lo necesitamos, ellos también. Una buena manera de que los niños/as aprendan mejor a controlar sus estados de ánimo y sobre todo sus malos momentos es con diferentes técnicas que les permitan relajarse y aprender a mantener la calma.
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